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¿Qué es y cómo funciona el internet de las cosas?

El internet de las cosas es un concepto que tiene gran relevancia en nuestro día a día y, además, tiene gran proyección a futuro. Sin embargo, aunque interactuamos frecuentemente con este, pocos conocemos qué es y cómo funciona el internet de las cosas.

Por esto, hemos dedicado este artículo a hablar un poco sobre este “movimiento” que ya está en marcha y que incluso es considerado por muchos como una especie de revolución, que cambiará considerablemente nuestras vidas en un futuro no muy lejano.

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¿Qué es el internet de las cosas?

Qué es el internet de las cosas

Bien, empecemos definiendo qué es el internet de las cosas o IoT por sus siglas en inglés (Internet of Things). Este es un concepto que hace referencia a la interconexión de diferentes objetos cotidianos con internet.

Los «integrantes» del internet de las cosas pueden ser dispositivos de computación, objetos y artefactos cotidianos, como electrodomésticos, vehículos, máquinas de uso doméstico o industrial, ropa, etc.

Inclusive, los seres vivos, como animales y personas, pueden formar parte del internet de las cosas. Básicamente, cualquier objeto que imagines puede conectarse a internet, sólo necesita el hardware adecuado y una red inalámbrica activa.

En palabras más simples, el internet de las cosas es un movimiento que plantea conectar al internet algunos objetos y cosas que no solían estarlo.

La finalidad de conectar todos estos objetos y artefactos cotidianos a internet, es que que puedan transferir datos a través de una red sin depender de la intervención humana.

Es decir, que el intercambio de datos se pueda hacer de máquina a máquina y no de máquina a humano. El objetivo principal del IoT es lograr que el internet trascienda las barreras de las pantallas.

O sea, que muchas más cosas estén conectadas a la red y no sólo en los dispositivos habituales (ordenadores, smartphones, televisores, etc.).

De esta forma, se creará un mundo hiperconectado en el que la mayoría de artefactos, dispositivos u objetos que utilizamos a diario, estén conectados a internet.

Lo que facilitará, entre otras cosas, los procesos industriales, la automatización diversas tareas cotidianas, la medición de datos y demás.

Un poco de la historia del internet de las cosas

El concepto del internet de las cosas tomó mayor relevancia y llamó la atención de más personas en el presente año, gracias al anuncio de una nueva red 5G. Sin embargo, la idea del IoT ya se planteó desde hace más de 20 años.

La primera vez que se escuchó hablar sobre una interconexión entre aparatos fue exactamente en el año 1999. El investigador Kevin Ashton planteó esta idea en una presentación que hizo a Procter & Gamble.

En dicha presentación, Asthon hizo énfasis en que todos los datos que estaban disponibles en internet habían sido capturados o generados por seres humanos. Eso no estaba mal, pero había que tener en cuenta que los humanos tienen tiempo, atención y precisión limitada.

Por ende, haciendo referencia a la administración de la cadena de suministro de la compañía Procter & Gamble, Asthon afirmó que, si hubiesen computadoras que recopilaran datos útiles y exactos sobre todo el proceso de suministro y además lo hicieran sin ayuda de un humano, todo el procedimiento se optimizaría, lo que sería de gran ayuda para mejorar el rendimiento.

Ashton por supuesto lo propuso sólo en el ámbito industrial y de producción. Pero hoy en día está presente tanto en la industria manufacturera como en los productos de consumo que usamos casi a diario, como electrodomésticos, vehículos, etc.

Es importante mencionar que, aunque fue en 1999 cuando se habló por primera vez del internet de las cosas, ya en 1980 se había creado el primer aparato conectado a internet. Es decir, el primer aparato que podemos considerar como dispositivo IoT.

Este fue una máquina de Coca Cola en la Universidad Carnegie Melon. A través de internet se podía ingresar a dicha máquina, verificar su estado y comprobar si tenía bebidas disponibles. Todo esto a través del intercambio de datos en la red.

¿Cómo funciona el internet de las cosas?

Suena algo complejo, pero la realidad es que el internet de las cosas ya está presente en nuestras vidas y podemos hallar cientos de ejemplos. Para que el internet de las cosas funcione, son necesarias principalmente dos cosas.

La primera es dispositivos con el hardware necesario para conectarse a internet (conocidos como dispositivos IoT); y la segunda, es una infraestructura de telecomunicaciones que soporte todos estos dispositivos conectados.

Dispositivos con hardware necesario para conectarse a internet

Qué es IoT

En la actualidad, ya hay compañías que fabrican todo tipo de productos que se pueden conectar a internet, lo que permite controlarlos y monitorearlos desde allí.

Esto satisface la primera necesidad, pues el mercado se está dotando de aparatos con el hardware necesario para conectarse a internet.

Podemos encontrar lámparas, refrigeradores, sistemas de seguridad y vigilancia, altavoces, robots de cocina y muchos otros artefactos que ya forman parte del internet de las cosas. Es decir, que vienen de fábrica con todo lo necesario para conectarse a internet.

De igual forma, en algunas industrias, como la industria automotriz por ejemplo, podemos encontrar diferentes componentes de un automóvil que transfieren datos a la red para brindar información acerca del estado del coche (sensores de proximidad, sensores que miden el nivel de presión de los neumáticos, etc.).

Así como estos dispositivos envían datos, también los reciben. Los datos de regreso son instrucciones para que realicen determinada acción de forma automática, sin que haya un humano de por medio (esto gracias a la inteligencia artificial). Dicha acción puede ser enviar una alerta, encender o apagar otro dispositivo, etc.

Por ejemplo, en un sistema de seguridad con sensores de presencia, cuando los sensores detectan movimiento, estos envían la información. Al enviarla, se activa una reacción en cadena que tiene como finalidad activar la alarma de seguridad. Y todo esto se logra gracias al IoT.

Infraestructura de telecomunicaciones que pueda soportar todos estos dispositivos conectados

Red 5G

Aquí es donde se relacionan el internet de las cosas y la nueva red 5G. De acuerdo con un estudio de la consultora Gartner, en el presente año (2020) alrededor de 37.000 millones de dispositivos están conectados al internet de las cosas.

Este es un número considerable y necesita de una buena infraestructura de telecomunicaciones que pueda soportar todos estos dispositivos conectados transfiriendo datos casi de forma simultánea. Además, este servicio debe satisfacer las necesidades de alta velocidad, baja latencia y poco consumo energético.

Por ende, la red 5G es un elemento fundamental del internet de las cosas. Sin esta, difícilmente se podrían conectar tantos dispositivos entre sí y a la red.

Hay que tener en cuenta que todo indica que, a medida que avance el tiempo, serán más y más los dispositivos conectados al IoT.

Este año son 37.000 millones, pero para los años que se aproximan pueden ser muchísimos más. Otro de los factores fundamentales, es la expansión del espacio de direcciones IPv6.

Y es que cada dispositivo conectado a la red debe tener su dirección IPv6 que le permita diferenciarse de los demás y ser identificado. Por ende, se debe crear un espacio de direcciones IPv6 inmenso, que pueda cubrir la demanda de direcciones IP para todos las cosas que se quieran conectar a internet.

Ventajas del IoT

A continuación, te mostraremos las ventajas del internet de las cosas. Estos son algunos de los beneficios que podríamos tener en un futuro no muy lejano, cuando nuestro mundo esté hiperconectado.

  • Todo podrá ser medido: Sea lo que sea que esté conectado al internet de las cosas (servicios, procesos de producción, artefactos, electrodomésticos, coches, etc.) Todo podrá proporcionarnos datos, es decir, todo será medible.
  • La toma de decisiones será mucho más sencilla: Teniendo datos verídicos de cada cosa, podremos generar estadísticas y basarnos en estas para tomar todo tipo de decisiones con mayor rapidez y precisión.
  • Los datos subidos al internet de las cosas se podrán ver en tiempo real: Esto permitirá usarlos de inmediato, así que se ahorrará mucho tiempo.
  • Los datos del IoT podrán ser compartidos: De esta forma, no estarán limitados a que sean del conocimiento de una persona o una máquina solamente, sino que cada dato se puede compartir con un ilimitado número de personas y dispositivos conectados a la red.
  • Las industrias se interconectarán: Gracias al IoT, las industrias podrán trabajar estando conectadas entre sí. Todas con el mismo objetivo, diseñar, fabricar, producir y distribuir productos y servicios de alta calidad que ayuden a mejorar nuestras vidas.

Desventajas del IoT

No todos es color rosa, la conexión de tantos dispositivos a la red significará un incremento considerable en el número de datos recopilados y transferidos. Aunque esto tiene sus beneficios, también tiene algunos aspectos negativos, como los siguientes.

  • La seguridad que debe haber en el internet de las cosas debe ser muy avanzada, cosa que hasta ahora no se ha logrado. Esto para evitar hackeos o filtraciones de datos.
  • Como hay tantos datos en la red, se dificulta la tarea de identificar cuáles son verídicos y cuáles no. Por ende, es un ambiente propicio para colar información falsa de forma malintencionada.

Como podrás ver, las ventajas del internet de las cosas son mucho mayores que las desventajas. Estas últimas tienen que ver únicamente con el tema de la seguridad, si esto se resuelve, entonces ya no habrá problema alguno, el IoT podrá formar parte de nuestras vidas al 100%.

Podremos conectar al internet casi todos los aparatos físicos que existen en el mundo, con el fin de crear una super conexión que nos ayude en diversos ámbitos, como por ejemplo, los que te mostraremos a continuación.

¿Para qué sirve el internet de las cosas?

Para qué sirve el internet de las cosas

Ya hemos hablando un poco de las aplicaciones del internet de las cosas. Es decir, del porqué es útil para nosotros conectar a internet algunos artefactos que antes no lo estaban. Pero bajo estas líneas detallaremos mejor para qué sirve el IoT.

Este sistema puede tener muchas aplicaciones y mejorar numerosos procesos. Sin embargo, aquí hablaremos sólo de aquellas industrias en donde ya está presente o en donde se tiene planificado implementar a corto plazo.

Domótica

La domótica en sí se basa en el internet de las cosas, pues consiste en todos estos sistemas capaces de automatizar una vivienda o edificación de cualquier tipo.

Para poder automatizar una vivienda u oficina, es necesario que los aparatos que hay en ella estén conectados a internet e interconectados entre ellos.

De esta forma, podrán enviar y recibir todos los datos necesarios para llevar a cabo diferentes acciones de forma automática, aportando mayor confort a los habitantes, mejorando la seguridad, la accesibilidad, la comunicación y facilitando el ahorro energético.

Agricultura y Silvicultura

Asimismo, el internet de las cosas puede usarse para automatizar diferentes procesos en la agricultura y la silvicultura. Por ejemplo, la detección de plagas y enfermedades, o las tareas necesarias para el correcto desarrollo de lo que se haya sembrado (abonado, riego, fertilización de suelos, arado, etc.).

Inclusive, se puede utilizar el IoT para la cosecha, pues mediante el intercambio de información proveniente de la siembra, se puede identificar el momento óptimo para la recolección.

Ganadería y cría de animales

¿Recuerdas cuando dijimos que los animales pueden formar parte del internet de las cosas y ser considerados como otros dispositivos más? Pues no mentíamos.

Con el IoT se puede hacer un seguimiento biométrico y de geolocalización en cualquier animal. De igual forma, se puede monitorear su salud con dispositivos conectados a internet o automatizar las tareas necesarias para cubrir las necesidades básicas del animal (alimentación, hidratación, etc.).

Seguridad y vigilancia

Como ya mencionamos hace algunas líneas, los sistemas de seguridad y vigilancia forman parte del internet de las cosas. Todos los componentes de estos sistemas están conectados entre sí gracias a que están conectados a la red.

Esto les permite enviar y recibir todo tipo de señales y alertas en caso de que se intente violar la seguridad de tus casa, oficina, negocio, etc.

Transporte y logística

¿Tú también eres de los que cuando pide un envío por Amazon revisa constantemente por dónde va el pedido? Bien, pues esto lo puedes hacer gracias al internet de las cosas, que permite monitorear vehículos de transporte o, incluso, la mercancía que transportan de forma individual.

Esto no sólo sirve para informarte por dónde va tu pedido, sino que también es útil en caso de robo o pérdida de la mercancía.

Pero esto no es todo, también se puede monitorear el estado de la mercancía. Por ejemplo, si se transporta mercancía que se debe refrigerar, se puede comprobar que tiene la temperatura correcta.

De igual forma, en cuanto a logística, el IoT es útil para calcular cuál es la mejor ruta de reparto y ver qué tal está el tráfico en las diferentes zonas por donde se quiere transitar.

Automatización y control de procesos de producción

Así como lo propuso Ashton en 1999, el internet de las cosas hoy en día es una herramienta que sirve para automatizar y controlar procesos de producción de todo tipo de productos.

Como dijimos hace algunas líneas, el IoT puede ser el producto como tal (lámparas, robots de cocina, cámaras de vigilancia, etc.). Pero también puede estar involucrado en el proceso de producción de estos artefactos, mejorando la calidad, fiabilidad y eficiencia del proceso de fabricación, distribución, etc.

Medicina, salud humana y animal

Gracias al internet de las cosas, se pueden usar dispositivos que midan y detecten variaciones significativas en determinadas constantes vitales de personas enfermas.

Por ejemplo, en una persona hipertensa, se puede utilizar un dispositivo que mida la presión arterial constantemente y alerte en caso de que esta sobrepase ciertos límites.

De hecho, algunos de estos dispositivos podrían ser capaces de suministrar medicamentos por sí solos al detectar que algo está mal.

Así como esto es útil en medicina para humanos, se prevé que pueda servir en veterinaria. Así que se podrán usar dispositivos IoT para mejorar la salud y calidad de vida de nuestras mascotas y otros animales.

Estos son sólo algunos de los usos que se le pueden dar al internet de las cosas. Pero, como mencionamos anteriormente, el potencial de este sistema, es muy grande. Por ende, puede ser útil para muchas cosas.

El internet de las cosas: ¿Estamos listos para tener un mundo hiperconectado?

Algunas personas muestran cierta renuencia a tener un mundo hiperconectado, mientras que otras están emocionadas por el cambio. ¿Tú, qué opinas? Sin lugar a dudas el IoT ha demostrado ser una tecnología que puede ayudarnos en muchas cosas.

Sin embargo, algunos temen que esta tecnología tenga muchos problemas de seguridad. Así que temen que mucha de nuestra información personal sea de conocimiento público.

En cualquier caso, el internet de las cosas es algo que ya está en marcha. Y ahora tú sabes todo lo necesario a cerca de este movimiento, así que puedes sacar tus propias conclusiones.

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